Un pingüino edulcorado, carismático y sin SPOILERS.

COLUMNA: TERAPIA SERIAL POR: Ricardo García, a 9 de octubre de 2024 / Fotos: INTERNET

Colin Farrell está probablemente en el mejor momento de su carrera actoral y te contaré el porqué, ya que con dos de sus más recientes trabajos en 2 series de TV de este año 2024, hace ya algunos meses atrás se estrenó una serie llamada Sugar, distribuida por la plataforma Apple TV, que pone de manifiesto desde el primer capítulo las bases para que sea de lo más atrapante. Un guión por parte de Mark Protosevich (La celda 2000, Soy leyenda 2007 y Oldboy 2013 Remake) excelentemente desarrollado. Cada capítulo no tiene desperdicio y vaya que hace valer esos 30 minutos; tiene un gran mérito, hecho que te anima a maratonear la serie en una sentada. La serie es dirigida por dos directores: Adam Arkin (actor) que, entre sus trabajos como director, están: Justified, Sons of Anarchy, The Americans, y por otro lado, está Fernando Meirelles, que, por si no te suena, fue quien dirigió la aclamada película en su momento: Ciudad de Dios.


Sugar es además un deleite visual y no me refiero por ello únicamente al físico del protagonista, sino al recurso de complementar las acciones del personaje de Farrell con escenas de películas viejas de detectives de aquel cine negro clásico de Hollywood de los 20’s o 80’s, o bien dramas intensos con momentos e imágenes que nos remiten a esa especie de melancolía y misterio. Ahora quiero pensar que este recurso se seguirá utilizando en la siguiente temporada y, sí amigos, ya está confirmada la segunda entrega debido al éxito y la buenísima respuesta en teleaudiencia y crítica.
La trama nos ofrece a un detective elegante y con clase, tipo James Bond, con un caso que se vendrá resolviendo a lo largo de los 8 capítulos. Es contratado por un millonario de Los Ángeles, ya muy entrado en años, con negocios en la industria del cine, para que encuentre a su nieta desaparecida. De entrada, parece una premisa típica, ya muy reutilizada o básica, pero es ahí donde Sugar tiene un as bajo la manga. Conforme se vaya avanzando, se empiezan a entretejer detalles que nos ponen a sospechar que este detective no es un hombre común y corriente, sobre todo por el elemento del tipo correcto, intachable y de buenos sentimientos, amable, que nos desarma con un buen verbo, y de inmediato te quieres hacer su amigo para luchar contra los malos.


La serie se apoya con recursos visuales y auditivos que no son usuales, por lo que su estilo narrativo tiene su propio sello, con overlapping sonoros, fotogramas quemados, miniflash forwards, etc. Todos estos recursos son sutiles y apreciados para un ojo educado en el cine, y sin duda funcionan como los cachitos de pelis viejas que verán por escasos segundos.
La historia tiene un giro sorpresivo, radical, descomunal e inesperado en el episodio 6; seguro tienes que verla para que sepas a lo que me refiero. Al final de la temporada, todo apunta a un reto enorme para el propio escritor de cómo superar y darle continuidad a esta primera temporada, ya que tiene muchos caminos por donde retomar con cierta coherencia, porque el giro puede llevar la serie al éxito o al fracaso; queda mucha tela de donde cortar.
Las actuaciones y personajes en Sugar tienen profundidad suficiente, hasta incluso una mascota que se integra perfecto al personaje de Farrell por algunos episodios, que nos recuerda otras historias del héroe envalentonado con su perro al lado; un guiño de Arkin, por seguro (Soy leyenda o algo más reciente por nombrar algo: John Wick).


Un ingrediente más en Sugar es que no sabrás reconocer de qué va un grupo políglota al cual pertenece el personaje de Farrell, que sostiene reuniones esporádicas que te harán pensar que se trata de un grupo de espías o un grupo sectario con intenciones desconocidas, que llevan entre todos un estudio sociológico en torno al cual conversan; los detalles son importantes.
Una serie de misterio, investigación y traición desde el punto de vista de un personaje enigmático que tiene que sobreponerse a sus superiores e incluso al poderío de la familia, complican la investigación de la nieta desaparecida. Es una serie que gustará a un público muy variado y te lo puedo garantizar; se nota el amor que le puso a esta serie un grupo de gente muy talentosa.


Ah, por cierto amigos, en la serie Sugar no esperen que aparezca un pingüino; siento decepcionarlos… Nuestro actor mítico Colin Farrell ha estrenado hace unos días atrás un súperhit y, al momento que escribo estas líneas, se han logrado publicar 3 excelentes capítulos de un total de 8, al igual número de entregas de Sugar, la nueva serie de DC y HBO Max: El Pingüino.


El nivel de producción de la serie de El Pingüino, de principio a fin, es tan notable que se percibe lo bien que se esmeraron en armar un guión ágil que conecte perfecto con el universo de BATMAN, con hechos que suceden días después de la última película de BATMAN de Matt Reeves. De hecho, esta serie es como una especie de puente que nos llevará a la próxima película del héroe encapuchado. Y, ¿qué decir de la actuación de Colin Farrell como Oz’ Oswald Cobblepot, lugarteniente de la familia Falcone que siempre busca su beneficio propio y hacerse un nombre en el mundo criminal?
No pasa nada si, por aras del destino, te fue imposible ver la nueva versión cinematográfica de BATMAN; creo que es un personaje muy icónico que hemos visitado con otros actores y sabemos más o menos de qué va. Obviamente, de un tiempo para acá se han puesto de manifiesto otros aspectos más interesantes de cada villano o héroe, hacia un lado más humano, imperfecto, oscuro y mundano.
La caracterización física de Farrell para darle vida y autenticidad al personaje del Pingüino es tan maravillosa y admirable, con 4 horas diarias de maquillaje y prótesis en cuerpo y rostro que lo transforman. Es tan impresionante y convincente que no le impiden realizar su trabajo, al punto que hasta la voz parece ser otra y distinta a la del actor. Fue tal el nivel de perfección que un compañero de escena tardó en reconocer al actor.


La trama creo que nos sitúa con un Pingüino que nos contará la historia de los inicios del villano, aún luchando por convertirse en el capo poderoso que en un futuro hará cosas siniestras contra Gotham y pondrá en dificultades a BATMAN. Hasta el momento hemos disfrutado un desarrollo redondo del mundo gangsteril mafioso cinematográfico de los realizadores de esta serie, y honor a quien honor merece; la creadora del guión es Lauren LeFranc, quien no tiene una gran trayectoria pero ha participado en Hemlock Grove, Marvel: Agente de SHIELD y Mi peor enemigo del 2008.


El elenco que rodea al personaje principal tiene excelentes diálogos, sin desperdicio ni aburrimiento. Por un lado, Cristina Milioti, quien personifica a Sofia Falcone, es sorprendente lo bien que está desarrollado su personaje, que apenas fue liberada de Arkham y ya impone con esos ojazos enormes que bien te transmiten temor como ternura por igual. Y un inicio poco explorado de un personaje allegado al Pingüino, su posible mano derecha en el futuro, Victor Aguilar, interpretado por Rhenzy Feliz, quien por cierto me recuerda físicamente al cantante The Weeknd. Por alguna razón, también me ha sorprendido gratamente. Y, ¿qué decir de la actriz que hace de mamá del Oz? Wow… Deirdre O’Connell, con un personaje que le da un mayor trasfondo psicológico al Pingüino, personaje que, sin espoilear, padece una enfermedad mental senil y roza entre la locura propia y del hijo incomprendido.
En cuanto a las secuencias de acción, no han sido muchas ni exageradas, y en todo caso han sido bien administradas; la trama la noto muy bien balanceada con realismo, sin dejar de lado el tono y misticismo con típicos encuadres y recursos del formato del cómic.


El nivel tan enorme de actuación de Colin Farrell lo puede poner fácilmente a contender para hacerse de un Emmy en la próxima emisión. No quiero adelantar expectativas, pero quizá Colin Farrell será recordado para la posteridad al nivel de Superman de Christopher Reeves o el Guasón de Heath Ledger, y que difícilmente alguien podrá superar en un futuro.
Hasta el momento, cabe mencionar que el personaje de BATMAN, como tal, ha dado nulas muestras de protagonismo o estar presente en alguno de los 3 capítulos que se han soltado hasta este pasado domingo. Nos quedan aún 5 entregas más de 45 minutos que podrían echarnos más que un guiño del enmascarado en algún instante, pero eso es parte de las expectativas que tiene a más de un fan en vilo. Algo muy disfrutable es que el personaje de Colin Farrell se mete en cada lío que, de momento, te pone en tensión de cómo saldrá airoso con tal ingeniosa habilidad histriónica del actor y del personaje por igual.


La parte de los créditos de cada capítulo siempre repiten, pero son magníficos cada vez que los ves, ya que se recompensan porque van acompañados de una canción distinta y muy apropiada al final de cada capítulo. Realmente es poco utilizado el recurso de flashbacks y esto es de agradecer; el vestuario, la ambientación y fotografía son excelentes.


Sin duda, Colin Farrell ha logrado lo que pocos actores consiguen en un periodo corto de tiempo o en la vida: poner su presencia en ambos proyectos con la misma energía y nivel actoral brutal. Y nos preguntamos: ¿Colin Farrell ya alcanzó su madurez actoral máxima fuera del cine? ¿Lo hace menos actor haber optado por proyectos en TV o, por el contrario, es un todo un reto triunfar en otro formato que no sea el cine? El tiempo lo dirá, y si disfrutan de ambas series inmediatamente tendrán respuesta a estas preguntas.


Y bueno, ya por último, como PILÓN, aquí les comparto el listado de las películas que aparecen por algunos segundos en la serie Sugar, con un nivel de edición magistral que no incomodan o hacen ruido a la trama; que, por el contrario, le dan un toque preciso de identificación nuestra con el personaje de lo que él y nosotros amamos del séptimo arte. Ya de plano, es como una receta que debes seguir al pie de la letra para poder hablar del cine duro y tendido como todo un conocedor experto.

  • EL BESO MORTAL 1955
  • JOHNNY GUITAR 1954
  • GILDA 1946

  • EL EXTRAÑO AMOR DE MARTHA IVERS 1946

  • EL CREPÚSCULO DE LOS DIOSES 1950

  • CALLEJÓN SIN SALIDA 1946
  • LLAMADA A CUALQUIER PUERTA 1949
  • EL MODERNO SHERLOCK HOLMES 1924 (cine mudo)

  • EN UN LUGAR SOLITARIO 1950

  • ASÍ HABLA EL AMOR 1971

  • DETOUR 1945
  • ASALTO Y ROBO AL TREN 1903 (cine mudo)

  • FORAJIDOS 1946
• PERDICIÓN 1944
  • LA COSA 1982 (Ciencia ficción / Horror)
  • EL TERCER HOMBRE 1949

  • TNT JACKSON 1974 (esta tiene mi edad por cierto / Artes marciales)

  • LA NOCHE DEL CAZADOR 1955
  • SED DE MAL 1958
  • CHANTAJE EN BROADWAY 1957

  • VÉRTIGO 1958
  • LA DAMA DE SHANGHAI 1947